Efecto del fotoperiodo en el crecimiento vegetativo de las orquídeas
La mayoría de las especies de orquídeas son originarias de selvas tropicales húmedas y cálidas de América del Sur, Asia y Australia; siendo así, son las condiciones climatológicas prevalecientes en las selvas tropicales del mundo las que proporcionan el entorno adecuado para cultivar orquídeas.
A nivel mundial, las orquídeas tropicales comprenden más de mil 200 especies de Dendrobiums, más de 50 de Vanda, más de 40 especies de Cattleyas y más de 300 especies de Oncidiums. La mayoría de ellas crecen en árboles o rocas y sólo algunas lo hacen en el suelo. En lo concerniente a las condiciones de iluminación, las vandas necesitan más luz debido a sus hojas de forma pequeña. A los Dendrobiums, Cattleyas y Oncidiums les gustan los lugares parcialmente sombríos. Por otra parte, las epífitas tropicales se han encontrado con una vida muy dura en ciertas épocas del año. Incluso en la selva tropical, tienen que pasar días o semanas sin agua y posteriormente tienen que mudar sus hojas y tallos. Las raíces tienen una punta que crece activamente y las partes más viejas están cubiertas por una envoltura de células muertas y vacías. La punta protege los tejidos internos que ayudan a la absorción de la humedad de la atmósfera.
Lo ya antes señalado, las orquídeas también tienen diferentes requisitos de luz en varias etapas de desarrollo después de la germinación. Para los híbridos de Phalaenopsis, la apertura de los estomas está influenciada por la luz azul específica durante la inducción fotosintética. La luz roja o roja lejana generalmente mejora el crecimiento vegetativo de las plántulas en el cultivo en matraz o invernadero, mientras que la luz azul mejora la producción de clorofila. Al igual que otras plantas, las orquídeas también se clasifican en de día corto, día largo o día neutro.
El efecto de la duración de la iluminación solar sobre el crecimiento vegetativo de las orquídeas es específico de cada especie, y las especies e híbridos dentro de un género pueden tener diferentes respuestas. Algunas orquídeas necesitan un día corto para el inicio de la floración, mientras que otras especies de Cymbidium y Phalaenopsis, no muestran ninguna respuesta o una respuesta ambigua al fotoperíodo dependiendo del impacto de la temperatura de crecimiento. El sistema de interrupción nocturna se puede aplicar para inducir la floración de las orquídeas de día largo y mejorar la calidad de las flores en el cultivo comercial.
Mecanismos de adaptación a diferentes condiciones de crecimiento
Las adaptaciones son mecanismos especializados que permiten a una planta o animal vivir en una localidad o hábitat particular. Estas adaptaciones podrían hacer muy difícil que la planta sobreviva en un lugar diferente. Hay tres tipos de adaptaciones de las plantas: adaptaciones estructurales, adaptaciones conductuales y adaptaciones fisiológicas. Las adaptaciones estructurales son los mecanismos físicos que les permiten competir. Un ejemplo espectacular de este tipo es la formación de espinas en cactus y rosas que pueden impedir que una planta sea pastoreada por animales. Las adaptaciones conductuales son acciones que realiza una planta para aumentar sus posibilidades de supervivencia. Un ejemplo de adaptación conductual en las plantas son los tropismos. Una adaptación fisiológica es un proceso interno que aumenta las posibilidades de supervivencia de una planta. Un ejemplo de una adaptación fisiológica que se observa en las plantas es la creación de veneno para la defensa.
La familia Orchidaceae ha derivado como hierbas de la broza o sotobosque del bosque terrestre hace aproximadamente 100 millones de años. Orchidaceae pertenece a las 84 familias de plantas vasculares que cubren especies que siguen el patrón de vida epífita. Entre las plantas con flores, las orquídeas son la segunda familia más grande con los grupos más diversos de angiospermas en términos de forma floral, tamaño, forma, color y fragancia, con casi 25 mil-30 mil especies pertenecientes a 750-800 géneros.
La familia orchidaceae comprende cinco subfamilias, a saber, Apostasioideae, Cypripedioideae, Vanilloideae, Orchidoideae, Epidendroideae. Las orquídeas cubren alrededor del 8% de la diversidad de especies de angiospermas. Las especies han sido identificadas y aceptadas, aunque cada año se añaden varios cientos de nuevas especies. Botánicamente, las orquídeas son plantas monocotiledóneas. Pueden ser epífitas, terrestres y litófitas. A nivel mundial, las orquídeas son epífitas y/o litófitas, 70%; terrestres, 20%, y litófitas, epífitas y terrestres, lo que representa un 5%.
Las orquídeas epífitas generalmente se caracterizan por hojas suculentas con paredes celulares gruesas, cutículas y estomas hundidos, mientras que las orquídeas terrestres poseen rizomas, bulbos o tubérculos. Tienen un largo período juvenil, tasa de crecimiento lenta. Se sabe que las orquídeas epífitas se adaptan a hábitats semiáridos con sequías periódicas utilizando el metabolismo del ácido crasuláceo. Las orquídeas con hojas suculentas como Bulbophyllum, Phalaenopsis son características de la expresión CAM, mientras que las orquídeas de hojas delgadas como Coelogyne, Arundina fijan carbono principalmente a través de la vía C3.
La expresión de las especies intermedias C3 varía con las condiciones experimentales como el fotoperiodo, la luz, la temperatura, las concentraciones de dióxido de carbono atmosférico, la sequía y la salinidad. Las plantas tolerantes a la sequía también pueden acumular diferentes solutos en el citosol para reducir el potencial osmótico y mantener la turgencia celular. Otro mecanismo de adaptación de las orquídeas a la sequía es la acumulación de prolina en las plantas, una respuesta fisiológica común al estrés abiótico que se adapta a las condiciones climáticas adversas, incluida la osmorregulación en la tolerancia a la sequía. Durante la sequía se logra una mayor eficiencia de uso a través de la osmorregulación, regulación a nivel estomático para reducir la pérdida de agua por transpiración. En las orquídeas bulbosas epífitas C3, los pseudobulbos juegan un papel importante en el almacenamiento y suministro de agua.
Usos prácticos de las flores de orquídea cosechadas
Millones de orquídeas de miles de especies diferentes se cosechan en la naturaleza en todo el mundo por sus flores, pseudobulbos, tubérculos, raíces y frutos. Las orquídeas representan una de las familias de plantas con flores más grandes y mejor distribuidas, con más de 28 mil especies, y la cosecha y el comercio de orquídeas son igualmente diversos.
Incluye por supuesto, miles de especies cosechadas como ornamentales para jardines de patio trasero y colecciones de aficionados especializados, y para celebraciones culturales o religiosas. También incluye especies comestibles cosechadas para productos como el pastelde chikanda, la bebida salep, el helado dondurma/kaimaki y el helado de vainilla.
También se cosechan muchas especies con propiedades medicinales, como Dactylorhiza hatagirea, cuyos tubérculos se utilizan en las tradiciones medicinales populares de Ayurveda, Siddha, Unani y del Himalaya, y Dendrobium spp. utilizada en la medicina tradicional china. Los volúmenes comerciales y la dinámica espacial y temporal siguen estando poco documentados para todos estos productos, pero las pruebas disponibles apuntan a la prevalencia del comercio a gran escala de muchas orquídeas recolectadas en el medio silvestre. Existe una suposición generalizada, reflejada en la literatura y la política, de que la cosecha de orquídeas silvestres no puede ser sostenible. Sin embargo, hay pocos datos empíricos sobre los efectos de la cosecha en la persistencia de las poblaciones de orquídeas, o sobre las condiciones en las que la cosecha podría ser sostenible.
La literatura sobre la conservación de las orquídeas se centra en gran medida en la dinámica poblacional de las especies y las poblaciones que no se cosechan; sobre variables importantes para la conservación ex situ e in situ, y sobre cómo detener el comercio no regulado o ilegal de plantas silvestres. Sin embargo, si bien hay muchos ejemplos de cosecha insostenible, también hay ejemplos convincentes de cosecha a largo plazo de algunas especies de orquídeas que han persistido, lo que sugiere sostenibilidad.